Espacio judicial europeo y Tratado de Lisboa: hacia un nuevo Derecho internacional privado
Resumen
Los objetivos prioritarios de la UE consisten en la creación de un auténtico espacio europeo de libertad, seguridad y justicia y el establecimiento de un verdadero mercado interior. La instauración de un espacio judicial europeo exige la eliminación de barreras jurídico-públicas y barreras jurídico-privadas que dificultan la creación de un espacio sin fronteras interiores en el que el ciudadano pueda ejercitar sus derechos fundamentales y sus libertades comunitarias. En definitiva, tales barreras obstaculizan el correcto funcionamiento del mercado interior. Por tal razón y para lograr dichos objetivos, las instituciones comunitarias resultan competentes para adoptar medidas en el ámbito de la cooperación judicial en materia civil con repercusión transfronteriza fundada en dos herramientas: El mutuo reconocimiento de las resoluciones judiciales y extrajudiciales y la aproximación de las disposiciones legales y reglamentarias de los Estados miembros. Ahora bien, para formar un único Estado resulta imprescindible que los países de la UE compartan valores sociales, morales y jurídicos similares. En consecuencia, la creación de un auténtico espacio judicial europeo únicamente tiene sentido si actúa como herramienta para alcanzar el correcto funcionamiento del mercado interior.